Sagita

En cuanto a la ciudad de Sagita, era conocida por ser cuna de importantes arqueros y exploradores. La moda era parecida a la de los arianos, debido a la proximidad de estas ciudades, aunque con unos aires menos severos y más hippies. Sus gentes eran curiosas, alegres, optimistas y despreocupadas y gustaban de hacer fiestas. A nadie allí le hacía mucha gracia la idea de trabajar. Inquietos y de espíritu vivo, los sagitarianos nunca dejaban de reír, incluso en la adversidad, pues tal era su legendario optimismo. Sus actividades favoritas eran los deportes, destacando el tiro con arco, la exploración del territorio circundante y las celebraciones informales. El jefe de la ciudad era casi una mera institución diplomática, pues allí reinaba la anarquía más que el orden. La arquitectura de los edificios era sencilla y la mayoría de las casas eran chozas.