Cascadas

Hace mucho tiempo que no hablo de cascadas... De hecho creo que hasta la última que ha habido no la comenté como tal...
Y me acabó de decidir el otro día cuando alguien me dijo: sé agua. Pero AGUA, no agua en una botella... que sería una botella, ni agua en una tetera... no... AGUA.

Ahora quedan corrientes de aquella gran cascada... todo son rápidos, en los que a veces me hundo y a veces ni siquiera me salpican. No hay cascadas alrededor... sólo pequeñas corrientes procedentes de riachuelos que desembocan en mi río... ni siquiera se les puede llamar afluentes. Algunos, lo hacen con más fuerza desde lo alto de las montañas... Otros vienen en llano y pasan casi desapercibidos. Pero ninguno me empuja tanto como para salir de los rápidos. Claro que como es continuo devenir... nunca estaré dos veces en el mismo río, porque en la mezcla está el interés de no salir de aquí.
Además es difícil navegar con tanto sol que refleja en el agua y ciega...

Y las cascadas vendrán... se avecinan. Seguro. Estoy acostumbrada a no acostumbrarme demasiado a un estado fijo. Y mientras disfruto, que no todos tienen la suerte de ser agua o vivir rodeados de ella :)

AguA... rumoR de Vida.