200

200 post han ido dejando esencia y estela de mi vida y mis impresiones a lo largo de este año y pico de blog. Y no me arrepiento ni de uno de los 200, porque creo que la sinceridad y expresividad ha sido lo más característico de cada uno de ellos. A mi parecer, he sabido ignorar ese "quién me lee" y escribir desde el corazón, con las consecuencias que trajera... (que a veces no han sido nada, nada buenas), porque... "arrepiéntete sólo de las locuras que no cometas".

Una etapa de blog con millones de altibajos, con la felicidad más plena de la que he gozado hasta ahora, y la pena más profunda de la que salía cuando decidí iniciar el blog.

En ningún momento me he cansado de esto, nunca pensé en abandonar ni crear otro blog simultáneo, ni cambiarme, ni tener otro oculto... Este es mi blog, este soy YO, y creo que aquí puedo expresarme con total libertad sin necesidad de esconder nada en ningún sitio.

Del blog... lo mejor? Mis escondites, todos los blogs de los que me leéis y comentáis y a quienes tengo posibilidad de visitar. Gracias por hacer posible continuar aquí después de tantas y tantas letras, con o sin orden, aburridas o divertidas, sin sentido o coherentes...